HACEMOS UNA QUEDADA
21/09/2017
Tras concluir la primera semana y conseguir obtener un grupo unido y de buen rollo, decidimos concretar un día para poder salir todos juntos a comer y así poder conocernos más.
Llegado el jueves empezamos el día con una clase de Metodología de la Intervención Social (MIS), seguido de una hora de Formación y Orientación Laboral (FOL), finalizado por tres horas de Desarrollo Comunitario (DC) y Tutoría en la cual decidimos mediante una votación cual sería nuestra delegada y nuestro subdelegado para que representara a la clase el resto de lo que va de curso a partir de ese momento.
Tras concluir con las clases sobre las dos y media aproximadamente, decidimos salir hacia un supermercado para así poder comprar algo para comer y algo para beber. Antes de llegar al río, el lugar donde habíamos quedado para hacer la comida y así conocernos mejor, algunos compañeros fueron a dejar sus efectos personales en sus coches y otros a recoger otros como la guitarra para dar un mejor ambiente si cabe entre los integrantes de este curso. Una vez en el río, decidimos elegir comer debajo del umbracle ya que se estaba bien de temperatura y había algún que otro banco para sentarnos. Empezamos a comer mientras comenzaban conversaciones con el fin de conocer mejor a las personas que teníamos a nuestros lados, a aquellos que llamaríamos compañeros durante estos dos años venideros. Tras la comida decidimos empezar a hacer algún juego en grupo para entretenernos y romper el hielo (si es que queda algo que romper…) entre algún nuevo integrante del grupo TASOCT y algún invitad@ especial que vino a la comida como invitad@. Dentro de estos invitados surgieron dos espontáneos de un lugar muy lejano. A pesar de no saber nada de castellano, estos dos nuevos amigos de Rusia, decidieron unirse a la comida y jugar y bailar con nosotros. Para finalizar la comida decidimos realizar unas danzas dirigidas por algunas de nuestras buenas compañeras y alguna que otra “Black Story” para hacernos pensar y trabajar en equipo y así resolver los enigmas propuestos. Una vez finalizadas estas actividades, recogimos el desastre de la comida y cada uno volvió a su casa para poder descansar y prepararse para la siguiente clase con los que a partir de ahora llamaríamos nuestros nuevos compañeros.
Jimmy&Andrea
Tras concluir la primera semana y conseguir obtener un grupo unido y de buen rollo, decidimos concretar un día para poder salir todos juntos a comer y así poder conocernos más.
Llegado el jueves empezamos el día con una clase de Metodología de la Intervención Social (MIS), seguido de una hora de Formación y Orientación Laboral (FOL), finalizado por tres horas de Desarrollo Comunitario (DC) y Tutoría en la cual decidimos mediante una votación cual sería nuestra delegada y nuestro subdelegado para que representara a la clase el resto de lo que va de curso a partir de ese momento.
Tras concluir con las clases sobre las dos y media aproximadamente, decidimos salir hacia un supermercado para así poder comprar algo para comer y algo para beber. Antes de llegar al río, el lugar donde habíamos quedado para hacer la comida y así conocernos mejor, algunos compañeros fueron a dejar sus efectos personales en sus coches y otros a recoger otros como la guitarra para dar un mejor ambiente si cabe entre los integrantes de este curso. Una vez en el río, decidimos elegir comer debajo del umbracle ya que se estaba bien de temperatura y había algún que otro banco para sentarnos. Empezamos a comer mientras comenzaban conversaciones con el fin de conocer mejor a las personas que teníamos a nuestros lados, a aquellos que llamaríamos compañeros durante estos dos años venideros. Tras la comida decidimos empezar a hacer algún juego en grupo para entretenernos y romper el hielo (si es que queda algo que romper…) entre algún nuevo integrante del grupo TASOCT y algún invitad@ especial que vino a la comida como invitad@. Dentro de estos invitados surgieron dos espontáneos de un lugar muy lejano. A pesar de no saber nada de castellano, estos dos nuevos amigos de Rusia, decidieron unirse a la comida y jugar y bailar con nosotros. Para finalizar la comida decidimos realizar unas danzas dirigidas por algunas de nuestras buenas compañeras y alguna que otra “Black Story” para hacernos pensar y trabajar en equipo y así resolver los enigmas propuestos. Una vez finalizadas estas actividades, recogimos el desastre de la comida y cada uno volvió a su casa para poder descansar y prepararse para la siguiente clase con los que a partir de ahora llamaríamos nuestros nuevos compañeros.
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