TEATRO

Hoy, por fin, hemos vuelto a llegar al último día de la semana sanos y salvos. El día de la semana que a todos tanto gusta, y este año un poco más todavía. Este viernes ya es el segundo por lo que ya sabemos un poco más cómo funcionan las cosas en este curso. El día tanto para mí como para mis compañeros se podría resumir en lo bien que lo pasamos en las dos primeras horas. Al ser la segunda vez que damos esta asignatura, ya sabemos cómo va a ir ligeramente el funcionamiento de esta asignatura, o eso es lo que creemos. La asignatura comienza como la semana anterior, con la actividad en la que estamos todos en un círculo y mediante una serie de movimientos realizamos la acción de pasarnos energía para así poder empezar la clase con más ánimo y para poder despertarnos un poco ya que a pesar de que nos guste tanto esta asignatura, es inevitable el estar cansados después de una semana tan intensa y de madrugar tanto. Tras esta genial actividad, continuamos con otra actividad la cual transcurre a lo largo de toda la sala. Todo el mundo debía andar a lo largo de la sala y una vez el profesor diera una señal, deberíamos quedarnos quietos y recordar la zona en la que estábamos como punto uno, después movernos a un punto que deberíamos haber fijado como punto dos y gritar nuestro nombre intentando hacer que este coincidiese con el del resto de compañeros, finalmente llegar a un tercer y último punto en el cual debíamos hacer una pose y quedarnos quietos hasta que alguien empezara a moverse y volver a repetir el juego hasta que lo hiciésemos todos a la vez. Para continuar escogimos a una pareja y debíamos hacer la actividad llamada “El Espejo” en la cual nos poníamos de frente con nuestra pareja y teníamos que imitar los movimientos de este. Una actividad en la que conseguimos encontrar una conexión entre nuestras parejas y pasar además un buen rato. En la siguiente actividad escogíamos a otra pareja y andábamos por la sala, uno de la pareja debía ser el fotógrafo y el otro con los ojos cerrados la cámara. En este caso el fotógrafo guiaba a la cámara por la habitación y realizaba tres fotografías de lo que le parecía más bonito de la sala, después los papeles se intercambiaron y el que había sido la cámara pasaba a ser el fotógrafo, pero esta vez debería sacar fotografías de algo que no le gustara. Una vez terminadas las fotografías, se hicieron dos grupos. Estos debían representar un concepto el cual deberían haber acordado entre todos los integrantes del grupo. Una vez elegido el concepto, este era representado y el equipo restante debería averiguar de qué concepto se trataba. Para terminar esta sesión, el profesor proponía una última actividad, la cual consistía en ponerse en círculo y elegir un concepto como podría ser “fuerza”, “valentía” o “tristeza”. Una vez elegido el concepto un grupo de cinco o seis personas debería meterse dentro del círculo y representar mediante una estatua lo que para ellos significaba este concepto mientras que el resto del grupo daba vueltas alrededor de la figura y contemplaba el resultado de sus compañeros. Y así fue como terminamos con la segunda gran sesión de esta asignatura que tanto nos va a enriquecer culturalmente y que nos va a ayudar a fortalecer los vínculos entre este magnífico grupo que ha surgido por nuestro común aprecio a la animación.

Andrea&Jimmy